Opinión: Por una nueva agenda de debate

noticias_imagenes_12136_15259El gobernador dedico un tiempo excesivo al conocido relato sobre las bondades de las SAPEM, ignorando absolutamente otros temas que generan expectativa en distintos sectores sociales, como por ejemplo la necesaria referencia a una política laboral integral para el sector público. Carlos Luna, diputado provincial, por Radio La Red

En cumplimiento de mi responsabilidad como representante del pueblo, hago conocer mi opinión en relación al discurso del Sr. Gobernador de la provincia en oportunidad de inaugurar un nuevo periodo de sesiones de la Legislatura Provincial; agradeciendo la deferencia de los medios de comunicación que tengan a bien publicarla.

Mi primera consideración es que el gobernador dedico un tiempo excesivo al conocido relato sobre las bondades de las SAPEM, ignorando absolutamente otros temas que generan expectativa en distintos sectores sociales, como por ejemplo la necesaria referencia a una política laboral integral para el sector público que vaya más allá del mero anuncio sobre la cantidad de aumentos que habrá en el año y que se proponga –progresiva y rápidamente- mejorar la calidad de vida de los trabajadores a partir de una mejora salarial sustantiva y de terminar con la precarización laboral que en los niveles en que se encuentra lo convierte al estado en el primer empleador en negro.

Me parecía imprescindible también conocer las razones de la improvisación en materia de política industrial, habida cuenta de que constituía un secreto a voces el fin del régimen de Promoción Industrial y que las otras provincias alcanzadas por el beneficio fiscal ya hace años que trabajan en construir nuevas herramientas para sostener e incrementar el empleo en el sector.

Pese a manifestar su adhesión al gobierno nacional, las principales políticas generadas y ejecutadas desde 2003, en nuestra provincia brillan por su ausencia.

Resulta necesario abrir en la provincia una agenda para el debate que incluya –entre otros temas- la reforma del sistema electoral que instrumente las primarias abiertas, simultaneas y obligatorias en los partidos; el acceso igualitario en los medios de comunicación públicos; la democratización de la justicia; la coparticipación municipal ; la elaboración de un plan de desarrollo productivo discutido por todos los sectores; el acceso a la información pública y una ley de ética pública que permita al pueblo el conocimiento real del patrimonio de los funcionarios.

Por Carlos Luna, diputado provincial y presidente Partido Norte Grande